martes, 26 de mayo de 2020

El día que dejó de nevar en Alaska





Título: El día que dejó de nevar en Alaska

Autora: Alice Kellen

Páginas: 352

Editorial: Titania (Titania Fresh)





Un chico con el corazón de hielo. 
Una chica que huye de sí misma. 
Dos destinos que se cruzan. 

Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que uno de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distante, pero Heather puede ver a través de todas las capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás. 

Pero, a veces, la vida te da 
una segunda oportunidad. La nieve 
empieza a derretirse. Y todo encaja.



Esta fue la primera historia que elegimos para la primera lectura conjunta que hice con las chicas: Yoli, Lore y Yoly Mosteiro. Todas teníamos ganas de leer algo de la autora y nos decantamos por esta historia que todos hablaban maravillas de ella.
Es mi segunda lectura de la autora y su pluma ya me había gustado. Es delicada, sencilla y transmite mucho sentimiento con sus palabras. 

En este caso tenemos por un lado a Heather: una chica que huye de un pasado complicado. Ocurrió algo en su ciudad natal que hizo que decidiera irse de allí y empezar de nuevo. Tiene algunos problemas que tendrá que ir haciendo frente poco a poco y una nueva ciudad, (aunque sea alejada de los que más quiere), será el lugar indicado para recuperarse y empezar de nuevo. Y por otro lado tenemos a Nilak: lo veremos al principio como un chico serio, de pocas palabras y con mirada huraña. Poco a poco iremos viendo que él también tiene un pasado muy complicado y doloroso que le hacen ser así. Y gracias a Heather irá volviendo a sacar su verdadera personalidad: protector, decidido, luchador y muy tierno. 
Si tengo que destacar otro personaje ese es Caos: y es que este lindo perrito, algo travieso pero muy cariñoso, será la clave para que Heather y Nilak puedan superar su dolor y seguir adelante.

La trama reconozco que al principio me pareció algo lenta y un poco lineal, pero casi llegando a la mitad se empieza a poner realmente interesante y no puedes parar de leer. No sólo vamos a ver como evolucionan nuestros personajes, sino que nos adentramos también en el deporte nacional de allí: el canicross. Este deporte será la clave para que nuestros personajes vayan dejando atrás todo el dolor que llevan y se vayan conociendo no sólo a ellos mismos, sino el uno al otro. Y con ello empiezan a crecer los sentimientos. Es una relación que se va cociendo a fuego lento (como a mí me gusta) y en la que la lucha por superar esos pasados de ambos se hace constante. Destaco que hay unos capítulos que son una especie de diario, que nos dejaba a las 3 con muchas incógnitas y con diversas teorías a cada cual más loca😂. Pero que hacia el final descubriremos el verdadero peso que tiene para la historia. 

En definitiva, es una historia de luchas personales, de saber perdonarse a uno mismo y no culparse por cosas que escapan a nuestro control. Una historia tierna, bonita y llena de superación que me ha emocionado en bastantes momentos. 




🌟Y hasta aquí la reseña de hoy, Readers. Espero que os haya gustado y si no la habéis leído os la recomiendo mucho. Que tengáis un buen día, cuidaos mucho y ya sabéis...¡¡a leer sin parar!! 📚📚